Educación, análisis de gente con experiencia en la pobreza

Análisis

Las personas con experiencia en la pobreza extrema compartieron sus puntos de vista sobre cómo llevar la educación al alcance de todos en el seminario sobre la evaluación de los ODM que tuvo lugar en Uagadugú, en marzo de 2013.

Necesidad de educación de la comunidad
En estos tiempos no puede conseguir éxito educativo solo. Un padre no puede guiar a su hijo solo. Es necesario que otras personas también le avisen al niño cuando se equivoca y le aconsejen. Cuando manda al hijo a la escuela, también usted tiene que ser como un estudiante. No puede quedarse en casa y decirse a si mismo que su hija está en la escuela, sin ir a ver al maestro, al menos tres veces al mes, para preguntar si la niña está yendo al colegio, si está aprendiendo bien, si el maestro está contento con ella. Tiene que levantarse e ir a ver al maestro para decirle: «ese es mi hijo y si no va a la escuela, dígamelo y yo le ayudaré«.
Los maestros necesitan perdonar al niño que encuentra dificultades en el aprendizaje. Si el maestro piensa que al pegar al niño aprenderá mejor, se equivoca. Al día siguiente, el niño estará asustado y se le olvidará todo lo que aprendió.
André Compaoré, Burkina Faso.

Combinar tipos de aprendizaje y saberes
Aquellos que dicen que la gente mayor no es inteligente, porque no estuvieron en la escuela, no saben nada. Nadie nace con el conocimiento de saber escribir. Yo soy un hombre mayor, no miramos trozos de papel antes de hablar, pero sí hablamos con nuestra inteligencia.
En estos tiempo, para enseñar a un niño, primero hay que empezar donde el niño quiera empezar; y de ahí se puede, poco a poco, añadir sus propios saberes. El aprendizaje de su hijo debe acoger el propio aprendizaje del padre. Usted necesita poder combinar distintos tipos de aprendizaje; si no lo hace, no llegará a ningún lado.
Mahamoudou Guérémi, Burkina Faso. El éxito se comparte
Si no apoya a su hijo, si no le muestra lo que necesita, entonces cuando crezca no podrá hacer nada bueno para él o para usted. Debe esforzarse para que su hijo tenga éxito. Si le ayuda a tener éxito, lo compartirá con usted, su familia, los vecinos, y su vida mejorará.
Mariam Zongo, Burkina Faso.