La salud: un análisis desde la realidad de los que viven en situación de pobreza y extrema pobreza

Análisis

Dentro del Primer Seminario de Evaluación de los ODM en América Latina y El Caribe las delegaciones participantes expusieron una problemática cotidiana como lo es la salud materno infantil.

Surgieron situaciones comunes que viven familias vulnerables, entre los que se cuentan la falta de acceso eficiente a una atención médica con calidad. Por ejemplo se desnudaron penurias que las familias tienen que pasar para acceder a una cita médica, acudiendo a los centros de salud incluso a las 4 o 5 de la mañana. Por otra parte también se abordaron temas como el desconocimiento de prácticas culturales ancestrales y falta de insumos, equipamiento e infraestructura.

Pero sin duda el punto fuerte fue la humillación y discriminación que sufren especialmente las mujeres al ser atendidas por profesionales de la salud como nos cuenta Petrona Pacoricona de El Alto-Bolivia “Los médicos nos humillan, te dicen: estás sucia, debes bañarte. Por ese miedo no vamos a los hospitales. Cuando vamos a hacernos atender los médicos no nos explican bien qué enfermedad tenemos, cuando les volvemos a preguntar el médico nos dice: ya te he explicado, tengo hartos pacientes que atender y salimos humilladas de allí, nos hacen sentir que somos tontas”.

Otro factor que no permite el acceso a una buena atención médica es la falta de recursos económicos como lo relata Clemente Huaccanqui de Cuyo Grande-Perú: “Yo tenía 7 hijos pero murieron dos. Uno de mis hijos murió por bronconeumonía, en ese momento no teníamos el dinero requerido y por falta de dinero perdimos a nuestro hijo de un mes

Por su parte Haití demostró una iniciativa diferente con los agentes de salud comunitaria polivalentes (ASCP), quienes organizan puestos de agrupamiento en barrios alejados donde dan a conocer los programas de prevención de enfermedades, interactuando íntimamente con aquellos más necesitados. “Cuando eres ASCP, vives en el barrio, pues conoces los problemas de la comunidad. Lo que es muy importante. Por mi parte, hago visitas a las casas dos veces al mes. Voy a caminar en la zona para encontrar a las familias y darme cuenta de los problemas que tienen.

Se concluyó en que el eficiente acceso y una buena calidad en atención médica son derechos humanos, cuyo desconocimiento agudiza más la exclusión de familias que viven en pobreza y pobreza extrema.