«Todas las manos son útiles para transformar la tierra» | Isabelle Pypaert Perrin

France Volontaires [Voluntariado Francia], la plataforma francesa de intercambio de voluntariado internacional y de solidaridad, publica este 30 de marzo «la Cartographie 2017 des engagements volontaires et solidaires à l’international» [Cartografía 2017 de compromisos de voluntariado y de solidaridad internacionales]. A continuación presentamos la introducción a la publicación realizada por Isabelle Pypaert Perrin, delegada general del Movimiento Internacional ATD Cuarto Mundo.

Isabelle Pypaert Perrin

Estos últimos años. La actualidad nos muestra hombres, mujeres, niñas y niños, familias y poblaciones, expulsadas de su lugar de residencia por los conflictos, los desastres naturales y también por la miseria más absoluta. Ante este tipo de situaciones, las fronteras entre los diferentes países se cierran, mientras que otras barreras invisibles se levantan en barrios y comunidades. Una cierta mirada excluyente y de discriminación surge en muchas de nuestras sociedades. La carrera de algunas personas, siempre en busca de mayor seguridad, empuja a otras a una situación de vulnerabilidad total.

Mediante esta cartografía, France Volontaires pone de manifiesto otra realidad, una realidad que muestra hombres y mujeres que aportan solidaridad y franternidad donde hay exclusión y angustia, que trabajan por una mayor justicia, construyen una ciudadanía de la acogida y un futuro diferente.

Compromisos cargados de esperanza

Estas mujeres y estos hombres comprometidos son numerosos y diversos. La historia del compromiso en favor de las personas migrantes en Calais muestra de manera sintética este hecho (Mathilde Pette y Yasmine Bouagga): algunas personas, integrantes de la ciudadanía local, suman sus fuerzas y crean asociaciones adecuadas, otras pertenecen a asociaciones humanitarias internacionales, otras crean redes desde diferentes países; el compromiso surge, entre otros espacios, en el interior de la comunidad de migrantes, etc. Sus objetivos son múltiples, desde cubrir las necesidades alimentarias hasta elaborar una estrategia de incidencia política.

Estos compromisos de voluntariado aportan toda una nueva perspectiva de la humanidad y del mundo. Aportan una esperanza y requieren ser más y mejor conocidos. A este esfuerzo contribuye la publicación de esta cartografía. Tener una mejor visión de la diversidad de los distintos compromisos permite suscitar otros nuevos, otras prácticas y convergencias y permite a cada persona, desde su especificidad, tener una perspectiva personal en unidad con los demás. Esta visión de conjunto permite evitar las divisiones y constituye un paso hacia una unidad en absoluto evidente. Ante las crisis duraderas, Agnès Golfier y Karine Penrose-Theis subrayan la importancia de las complementariedades.

Pero recordemos que la unión de los esfuerzos para poner fin a las situaciones de crisis supera la cuestión de las complementariedades y requiere un trabajo constante. Guillaume Nicoals plantea la siguiente pregunta: «¿Cómo deben establecerse las relaciones ‘socios-ONG-voluntariado-expatriado/a?». Esta pregunta no debe hacernos olvidar un cuarto socio; las personas y comunidades afectadas, que además de las dificultades que padecen, no pueden servir de terreno de división o fuente de solicitaciones divergentes sobre las que no tienen ningún control. Las personas más pobres nos han enseñado que la unidad no se puede establecer exclusivamente entre asociaciones. Una unidad auténtica únicamente puede existir si las poblaciones en situación de precariedad se asocian activamente en cada etapa: en la elaboración de objetivos de acción; durante su ejecución, para que puedan apoyarse en su propia solidaridad cotidiana y en su sensibilidad hacia las personas más abandonadas; y en el proceso de evaluación para cuestionar esta inclinación natural que conduce hacia quienes logran avanzar con mayor facilidad y obligarnos a centrarnos en quienes aún no se ha logrado alcanzar.

Las poblaciones locales; eje de las soluciones

Los Objetivos de Desarrollo Sostenible que tienen por vocación no dejar a nadie atrás, así como los Principios Rectores sobre la extrema pobreza y derechos humanos, aprobados en 2012 por las Naciones Unidas, invitan a las organizaciones de voluntariado a trabajar en la misma dirección. El «hacer conjuntamente» y no «hacer en lugar de», es un objetivo cada vez más común en las distintas formas de voluntariado. La asociación con las personas y comunidades, y en especial quienes  viven las situaciones más graves de pobreza, es un largo camino.

  • Las poblaciones están situadas en el centro de las soluciones, de la ayuda mutua y de las solidaridades que les permiten superar su situación

Los compromisos externos deben poder incorporarse a esta realidad si quieren lograr avances duraderos e inscribirse en las culturas de los países. En ATD Cuarto Mundo, hemos experimentado esta mutua colaboración que nos ha permitido permanecer en los países inclusive en períodos de gran inestabilidad. Esta mutua colaboración nos aporta reconocimiento y protección y ha permitido la evolución y adaptación de la acción a los diferentes eventos y así poder resistir juntos. Esta misma cuestión se aborda en el artículo «Le rôle des volontaires dans les situations de crises prolongées» [El papel que desempeña el voluntariado en situaciones de crisis prolongadas] (Agnès Golfier et Vénérand Nzigamasabo)

Esta cartografía pone de manifiesto una tendencia en aumento de un voluntariado del mundo para el mundo. Nos felicitamos por ello. De hecho, durante mucho tiempo se ha puesto el foco en los compromisos del voluntariado de los países del Norte respecto de los países del Sur. Sin embargo, nadie tiene el monopolio a la hora de dar y de mostrar generosidad. En todos los países, los compromisos voluntarios se ejercen en el ámbito local pero no únicamente. Este deseo, este espíritu internacional está presente, especialmente entre muchos jóvenes. Mujeres y hombres de Haití, de Tanzania, de Rumanía, de Filipinas… van a Francia, Gran Bretaña, Estados Unidos para ejercer su solidaridad, pero también a Burkina Faso o Perú… Estas mezclas surgen de intercambios que permiten que cada persona agudice su análisis sobre las injusticias, los abandonos, los prejuicios, y sobre las posibilidades de hacerles frente. Además, permiten una concienciación a largo plazo y se inscriben en el proyecto de futuro de cada individuo. Anima´terre, Cool´eurs du Monde, entre otros, muestran los beneficios que procuran (capítulo 4). En los equipos en los que se experimenta la diversidad, las relaciones de igualdad se cuestionan más allá de las competencias y de las diferentes capacidades. Constituyen una posibilidad para renovar en profundidad el compromiso voluntario. En el artículo «Vers un volontariat monde» [Hacia un voluntariado mundial], Alain Raymond y Edith Heurgon establecen una panorámica que abre las perspectivas que ofrecen estas posibilidades. En estos equipos viven y actúan conjuntamente voluntarias y voluntarios que proceden de países que han colonizado, explotado o establecido la guerra a países de otros voluntarios. Su participación conjunta de cara a un mismo objetivo les impulsa a encontrar semejanzas y a abordar de manera diferente su propia historia. Lo que está en juego es el surgimiento de otro tipo de ciudadanía arraigado en raíces profundas. La contribución de Florence Lhaddadène, «Comment les structures d´accueil malgaches perçoivent-elles les volontaires réunionnais» [¿Cómo perciben las organizaciones de recepción a las voluntarias y voluntarios de Reunión?], contribuye a un análisis en esta dirección.

Educación a la ciudadanía

Esta Cartografía de 2017, en repetidas ocasiones, recuerda la importancia de la formación. Llegar a un país, a una cultura que desconocemos, encontrar situaciones de pobreza extrema, integrar equipos conformados por personas muy diversas, trabajar en colaboración estrecha con otras personas; todo ello requiere, para poder lograrlo, una preparación y una formación. Cada persona necesita que sepamos sacar lecciones de las experiencias vividas y permitirnos así adquirir una cierta distancia. Pero cada asociación ofrece la oportunidad de avanzar en sus prácticas: «El marco de intercambio de buenas prácticas en el seno del voluntariado es fundamental para reforzar la calidad de los proyectos realizados»; ha subrayado Joris Thomann. Esta cartografía va más allá y pone de manifiesto la educación sobre la que se apoya el deseo y la práctica del voluntariado: una educación a la ciudadanía y la solidaridad internacional, una formación a lo largo de toda la vida, una experiencia vital que se convierte en una forma de vida (capítulo 3).

Los obstáculos para lograr esa movilidad siguen siendo numerosos, especialmente la dificultad para la obtención de visados. Así, los miembros del voluntariado procedentes de países de América Latina, del Caribe, de África, de Asia cada vez encuentran más dificultades para viajar en el mundo y ven como se les niega esta posibilidad. Pero los visados no constituyen el único obstáculo a la movilidad. Las posibilidades efectivas para jóvenes de medio socio económico desfavorecido, independientemente de su país de origen, se ven restringidas a la hora de participar a un compromiso de voluntariado. Tienen menos acceso a la información, deben contribuir económicamente a la vida familiar, etc.
La Ley de 2010 del Servicio Cívico avanza en la dirección correcta y abre diferentes posibilidades. En 1985, dirigiéndose a jóvenes de todo el mundo, muchos de ellos de medio desfavorecido, reunidos ante la sede de la Organización Internacional del Trabajo, con motivo del Año Internacional de la Juventud, Joseph Wresinski afirmó:

  • «Todas la manos son útiles para transformar la tierra».

Este llamado constituye una invitación a cada una de nuestras organizaciones a tomar en serio el compromiso de la juventud, de todos los medios sociales, de todo horizonte y de todos los países: así como a encontrar los medios necesarios para su realización efectiva. Su puesta en marcha recuerda el informe del Secretario General de las Naciones Unidas «Una humanidad, nuestra responsabilidad compartida» y a la Cumbre Humanitaria Mundial que siguió en Estambul. Actualmente estamos realizado algunos logros, continuemos avanzando en esta misma dirección.

Fotografía: Portada La Cartographie 2017 des engagements volontaires et solidaires à l’international [Cartografía 2017 de compromisos de voluntariado y de solidaridad internacionales]