¡Eres genial!

En Manila, cada sábado los mausoleos y las tumbas que los rodean se transforman en aulas de clase. Son los mausoleos de un cementerio, el único lugar que encuentran algunas familias de Manila donde vivir. ATD Cuarto Mundo Filipinas lleva a cabo un programa titulado «Ang Galing» que quiere decir «Genial». En el proyecto Ang Galing, las niñas y niños aprenden que, pese a sus condiciones excepcionales, pueden aprender a leer y escribir, y tener éxito en la escuela.

Let’s Go to Ang Galing!

Every Saturday, a mausoleum turns into a classroom, and niches become spaces where young minds are nurtured. ATD Fourth World Philippines continues its sincere effort to eradicate extreme poverty through education in its weekly reading tutorial program, “Ang Galing” at the Manila North Cemetery.From July 2016 to present, there are 40 children (ages 6-14 years old) enrolled in the program and about 153 volunteer teachers from different walks of life have spent time and effort in teaching these kids how to read and write. Through this, Ang Galing has maintained a ratio of 1 teacher per 1.6 kids within the past six months, ensuring that quality learning experience is being delivered to these children.Like Kuya Reymond and Kuya J.V., you can also make a difference in the lives of these children. Join Ang Galing every first 3 Saturdays and fifth Saturday of the month. For more information, you may contact Mae Ann Reginaldo at +63 918 963 1452 and check out our updates in our official Facebook page fb.com/ATD.Philippines.#AngGaling #Literacy #BeAVolunteerTeacher

Publiée par ATD Fourth World Philippines sur Mardi 7 février 2017

 

Aprendiendo el alfabeto, aprendiendo a tener confianza en si mismos

Muchas niñas y niños crecen escuchando todo el tiempo «¡eres extraordinario!», «¡buen trabajo»; desde que empiezan la escuela infantil u otras experiencias similares de educación temprana. Pero otros no tienen esa suerte porque sus padres y madres están muy ocupados intentando simplemente sobrevivir, o porque nunca han experimentado ellos mismos el hecho de que alguien les dijera lo geniales que son. Cuando integran la escuela, estas niñas y niños, aprenden que en absoluto son geniales. De hecho, la escuela termina siendo un lugar de fracaso y humillación continua para los estudiantes que no tienen suficiente preparación o que encuentran dificultades para seguir el ritmo de aprendizaje. No pasará mucho tiempo antes de que se sientan unos fracasados y que crean que en verdad no pueden aprender.

Invertir en las relaciones

El proyecto And Galing comenzó en 2012 y enseña a las niñas y niños el alfabeto, así como algunas bases de lectura y escritura en filipino. Cuarenta niñas y niños, entre seis y catorce años de edad, participan en el programa. La mayoría cursan entre primero y tercer curso de primaria, pero algunos ni siquiera están inscritos en la escuela. Desde julio de 2016, unos 270 maestros y maestras voluntarios, de diferentes orígenes sociales y económicos, han invertido su tiempo y esfuerzo en enseñar a estos niños a leer y a escribir.

La abuela de una niña que participa en el proyecto dice que su nieta tenía muy bajas calificaciones antes de integrar el programa. Cuando la niña empezó a participar de manera continua en el proyecto, consiguió comprender mejor sus lecciones porque mejoró sus habilidades de lectura y escritura. Entre tercero y cuarto curso de primaria, los niños han superado el curso de su hermana, la primera vez que pasa en la familia, según su abuela. De los 38 participantes activos en el proyecto, este año 31 han mejorado su capacidad lectora y de escritura en la escuela, y solamente siete repiten curso.

La autoestima de la niña o el niño así como una relación personal con los docentes son elementos muy importantes para el aprendizaje de los niños en Ang Galing. El actual éxito del aprendizaje de la lectura y la escritura está directamente relacionado con esas dos condiciones básicas. Las voluntarias y voluntarios del proyecto invierten esfuerzos en establecer una relación personal con todas las niñas y niños que participan. Desde julio a diciembre de 2016, Ang Galing mantuvo una ratio de un docente por cada seis niños, garantizando la calidad de la experiencia de aprendizaje con una atención personalizada.

«¡Puedo hacerlo!»

Tan importante como las clases de lectura y escritura, And Galing enseña a las niñas y niños que son geniales y que pueden aprender. Tras haber participado en el proyecto, las niñas y niños van a la escuela con una actitud positiva, diciendo, «¡puedo hacerlo!», marcando así la diferencia en su universo de aprendizaje. Como afirma uno de los profesores voluntarios en el vídeo:

  • «Cuando [las niñas y niños] piensan ‘soy realmente bueno’, o que ‘ya soy capaz de aprender’, sus capacidades para leer y escribir rápidamente acompañan a las palabras».

Las madres y los padres son los primeros socios del proceso de aprendizaje de sus hijos. Mediante reuniones regulares con los padres y madres, el programa Ang Galing les implica en el proceso de aprendizaje de sus hijos y les informa sobre su progreso, siempre que no pueden participar directamente en el programa. El programa establece una comunicación regular con la escuela para cada niña y niño escolarizado que participa en el programa. A partir de sus numerosos voluntarios, And Galing construye una comunidad educativa fuerte y de gran apoyo cuyos efectos se extienden más allá de las clases de apoyo a la lectura y la escritura.

Para más información sobre el proyecto o sobre cómo implicarse puede contactar con:

Mael Ann Reginaldo, coordinador del programa Ang Galing, " target="_blank" rel="noopener"> o pulsar aquí.

Para saber más sobre proyectos educativos similares que ATD lleva a cabo en el mundo o sobre cómo participar en tareas de voluntariado, pulse aquí.